martes, 28 de octubre de 2014

¿POR QUÉ NOS OPONEMOS A LAS APERTURAS EN DOMINGOS Y FESTIVOS?


Es evidente que la defensa de las aperturas en Domingos y Festivos se hace en defensa a su vez de los exclusivos intereses de las grandes empresas distribuidoras.

Este interés de las grandes superficies no es por favorecer un mayor consumo y una mayor actividad económica y a la vez mayor empleo, sino que se hace para robar cota de mercado a quienes no pueden soportar un calendario de libre aperturas, es decir, los pequeños empresarios locales.

Es una estrategia orquestada para ir generando entre la gente una opinión favorable a estas aperturas que allane el terreno, y para ello establecen una serie de ideas fuerza, sencillas y que se repiten machaconamente para introducirlas en el imaginario colectivo de forma casi automática. Sin embargo estas ideas no aguantan ni medio asalto en un debate serio.

 
ARGUMENTOS QUE SE UTILIZAN Y QUE SE DESMONTAN UNO A UNO

1.- AUMENTA LA ACTIVIDAD ECONÓMICA: El consumo no crece sino que se desplaza. Nadie compra más por tener un horario más amplio, sino que se sigue comprando lo que se necesita de manera general. Y si esa compra se hace en día festivo, se deja de hacer en otro momento.

Según los datos de un informe de la Universidad Autónoma de Madrid, el consumo no solo no crece, sino que por ejemplo en Madrid o Valencia, donde la liberalización es total, las ventas cayeron un 4,2% y un 3,4% respectivamente, caídas en ambos casos superiores a la media estatal.

2.- CREA EMPLEO: Otro argumento que tampoco es cierto. En Madrid el primer trimestre de 2014 el empleo cayó un 3,9%, duplicando la media estatal. Y en todo caso, si se diese alguna contratación sería en las grandes superficies, pero a costa de la pérdida del empleo en el pequeño comercio, lo que iría en detrimento no sólo de la cantidad, sino de la calidad del mismo. En estas grandes empresas no se aplican los convenios provinciales sectoriales, sino el convenio estatal de Grandes Superficies, con peores condiciones de trabajo. Igualmente el empleo que se crea es más parcial y más precario.

3.- DA UNA MAYOR LIBERTAD A LOS CONSUMIDORES: Algo que tampoco es cierto, ya que se va reduciendo la oferta a unas pocas grandes firmas que van copando cada vez más el mercado, y que lo van unificando y homogeneizando. Además se produce un segundo efecto indeseable, que no es sino el de la desertización de los núcleos urbanos, centro de las ciudades, barrios y pueblos, ya que obliga aun desplazamiento a las afueras, a los polígonos comerciales. Por no hablar de que esos desplazamientos que se multiplican, obligan a su vez a una dependencia mayor del vehículo particular.

Para reforzar esta idea de libertad se crean nuevos derechos "El derecho a comprar en domingo", un derecho que no existe frente a derechos reales: el derecho a un trabajo digno, el derecho al descanso o el derecho a la conciliación de la vida laboral y personal. Para sostener un derecho ficticio se atacan derechos laborales históricos.

4.- HAY DEMANDA ENTRE LOS CONSUMIDORES QUE PIDEN MÁS APERTURAS: En la CAPV la encuesta de Ikusmer de 2012, sitúa en el 70% el rechazo a las aperturas en Domingos y Festivos entre los consumidores. En Navarra existe una encuesta del Ayuntamiento de Pamplona que sitúa por encima del 80% el número de personas que no reclamaban un mayor número de aperturas, y está hecha en un momento en el que en Navarra se abría 4 festivos al año.

Hay que tener en cuenta que existe la posibilidda de comprar 6 días a la semana, en una horquilla de 15 horas al día. Si alguna persona en este horario no tiene capacidad de comprar o cambia radicalmente de ocupación, o seguramente no llegará a cobrar pensión de jubilación.

5.- HAY TRABAJADORES/AS VOLUNTARIAS: Se confunde intencionadamente voluntariedad con necesidad. En un sector donde los bajos salarios y los contratos a tiempo parcial son la norma, las empresas se aprovechan de esta necesidad para dar una imagen de voluntariedad que no es cierta.

Además esa incentivación se va reduciendo progresivamente con el tiempo. Cada vez menos se le da un carácter de excepcionalidad y se van entendiendo como días normales y obligatorios. En Navarra CAPRABO por ejemplo ha pretendido aplicar esta obligatoriedad de trabajar en Domingos y Festivos, además sin ninguna compensación económica excepcional.

6.- SE RELATIVIZA EL NÚMERO DE APERTURAS: Se le resta importancia a una o dos aperturas al año con el argumento de que son días interesantes de venta, en la época navideña o de rebajas, por ejemplo. La experiencia nos dice que abrir la mano a unas pocas aperturas sienpre acaba llevando a más.

En Madrid o Valencia no se empezó de golpe abriendo de forma absoluta, y hoy existe la posibilidad de hacerlo los 365 días del año. En Navarra por su parte no hace demasiado tiempo se abrían 4 dias al año, aperturas que se han ido aumentando por la presión de Corte Inglés, Carrefour, Decathlon y otros hasta las 10 actuales, apoyándose además en una legislación que lo permite, y que analizaremos a continuación.

Dos ejemplos nada más de cómo se van relativizando el número de aperturas: CCOO en la huelga convocada en Navarra el 3 de Enero de 2010, cuando se produjo la primera apertura en domingo, al acabar la movilización defiende que Navarra ha sido tierra de pactos y exige volver al escenario de las 4 aperturas al año. Por otro lado UGT de Navarra, recientemente valoraba como muy positiva la decisión del Tribunal Constitucional de levantar la suspensión cautelar de la ley de comercio de Navarra. Hay que tener en cuenta que esta ley establece en 10 el número de aperturas con algunas limitaciones en cuanto al cómo y al cuando, pero 10 al fin y al cabo.

Por tanto la defensa del 0 no es caprichosa ni maximalista, sino la posición lógica que de verdad está impidiendo en la CAPV una apertura que se iría aumentando igual que en todos aquellos lugares en los que en su momento se abrió la mano a las mismas.

EL PAPEL DE LOS DIFERENTES GOBIERNOS

En esta crisis nos hemos acostumbrado a ver cómo los diferentes gobiernos legislan en favor de los intereses de unos pocos, de los poderes económico y financiero. Dejan de lado los intereses de una gran parte de la población a las que se limitan a pedirnos sacrificios. Nos venden como inevitables medidas de recortes de derechos, cuando son simplemente medidas de una ideología que se impone al conjunto de la población.

En el capítulo de las aperturas en Domingos y Festivos, los poderes económicos están representados por las grandes superficies de carácter multinacional. Y frente a ellos el resto (trabajadores, consumidores y también pequeños empresarios del comercio de ámbito local principalmente).

Se ha producido una involución legal en este aspecto para favorecer el interés de quienes defienden y se benefician de las aperturas, que como venimos diciendo son exclusivamente las grandes empresas.

En 2012 el Gobierno del PP regula por decreto-ley una ley básica que eleva el número mínimo de aperturas de 8 a 10 y amplía de 12 a 15 el número de horas diarias de apertura. Una ley básica que impone regulaciones a las CCAA que son las que tienen las competencias con el argumento del interés general. Y utiliza la fórmula del decreto-ley que hurta el debate parlamentario y social porque no les interesa, como ya hemos dicho antes, un debate que no se sostiene. Una mayor libertad de horarios ni responde al interés general, ni existe ningún tipo de reivindicación social que lo reclame. Es decir, ni urgente ni importante.

Esta regulación del estado es trasladada a CAPV y Navarra de forma automática. Pese a que nos hablan de que se tratar de una ley básica para justificarlo, las élites políticas vascas de Gasteiz e Iruña están como en casi todo, de acuerdo, porque comparten la ideología neoliberal que está detrás de esta ley. El papel de los gobernantes locales se demuestra por sus hechos:

Yolanda Barcina no descansó hasta que el Corte Inglés se instaló en Pamplona, dándole todo tipo de facilidades para ello, pese a la oposición de los comerciantes locales. Hoy es la empresa que más está haciendo para la ampliación del número de aperturas. No deja de ser una broma que mientras se pone alfombra roja a la instalación de grandes superficies, se realicen desde el Gobierno de Navarra campañas de apoyo formal al pequeño comercio.

La legislación por tanto les favorece, y hay una coincidencia política en favor de las aperturas porque más allá de que lleven peineta o txapela, están todos de acuerdo. En la CAPV, a día de hoy sólo la presión sindical y social les impide las aperturas en Domingos y Festivos.


NUESTRAS FORTALEZAS Y DEBILIDADES:
LA SITUACIÓN DE LA CAPV FRENTE A LA DE NAVARRA

Decimos que la presión sindical y social está siendo clave para mantener las 0 aperturas en la CAPV. En este sentido la posición de ELA siempre ha sido clara, rotunda e inequívoca. Y sin el trabajo de ELA para hacer esto posible el escenario sería bien diferente. Hemos ejercido nuestra responsabilidad como sindicato mayoritario, y a la vista del resultado lo estamos haciendo bien.

Pero los que están enfrente son muchos y muy poderosos y es necesario tejer alianzas solidas para dar una respuesta global. Y estas alianzas en la CAPV son parte de nuestra fortaleza, y la falta de ellas en Navarra por contra, una de las principales causas de una situación por desgracia muy diferente.

En la CAPV se produjo en primera instancia una potente alianza sindical entre ELA y LAB, con una campaña sostenida en el tiempo, con el JAIETAN DENOK JAI como grito de guerra.

Esta alianza se ha ido aumentando y sumando a más actores contra las aperturas en Domingo y Festivo. En este aspecto hay coincidencias de intereses entre los trabajadores/as, los pequeños comerciantes y los consumidores. Se ha producido en los últimos tiempos una defensa conjunta de las 0 aperturas.

Ha sido necesario, partiendo de un esquema clásico sindical, de reivindicación y movilización y sin abandonarlo, pasar a tejer alianzas más amplias, con actores diferentes que más que número lo que aportan es diversidad de colectivos y la visualización de que la oposición a las aperturas no es sólo una cuestión de los trabajadores y trabajadoras del sector, sino de la sociedad en su conjunto.

En Navarra por su parte el escenario es bien distinto desgraciadamente. Los sindicatos mayoritarios ni han ejercido liderazgo, ni el problema de las aperturas está entre sus prioridades. ELA junto con LAB sí que socializamos e implusamos la campaña JAIETAN DENOK JAI, y hemos logrado arrastrar en diferentes ocasiones a UGT y CCOO a movilizaciones concretas. Sin embargo no son aliados fiables porque no se creen de verdad el discurso y en cuanto pueden relativizan y restan importancia a las aperturas en Domingos y Festivos.

Tampoco es posible una alianza con asociaciones de consumidores, que han criticado nuestras movilizaciones y vienen defendiendo el discurso contrario al nuestro, apoyando sin matices cuantas más aperturas mejor.

Y el papel más lamentable en mi opinión es el de los pequeños comerciantes, incapaces de plantarse de verdad en este tema pese a nuestras invitaciones a hacer un camino en común. Hablan en privado de que están en contra, pero pactan con los grandes operadores 10 aperturas al año, y han ejercido de grupo de presión para hacer cambiar de opinión al PSN que estaba dispuesto a apoyar una ley para Navarra que limitase a 4 las aperturas al año.

Y esta falta de alianzas, esta soledad en la defensa de las 0 aperturas hace sin duda que el escenario navarro sea mucho más preocupante, y que a día de hoy la realidad nos ha superado. No quiero dejar un mensaje pesimista sobre la situación de Nafarroa, y tenemos decidido trabajar para tratar volver a situar el debate de las 0 aperturas en el lugar que nunca debió abandonar.


A MODO DE CONCLUSIÓN

Debemos ser tractores de la movilización colectiva de forma continuada, sumando e implicando a la sociedad en su conjunto. Decíamos al principio que se utilizan argumentos de defensa de la aperturas que no sostienen un debate serio. Pues sigamos trasladando este debate a la sociedad. Combatamos la ignorancia y la intoxicación con información y datos.

Tenemos enfrente a las grandes empresas del sector, a las que les ponen la legislación en bandeja. La clase política gobernante defiende a estas grandes empresas y sus intereses. Y los principales medios de comunicación tanto públicos como privados son su altavoz.

Es imprescindible la movilización de los y las trabajadoras del sector, seguir trabajándola y organizando a la gente. Pero puede que con eso sólo no sea suficiente. De verdad ganaremos la batalla a las aperturas en Domingo y Festivos el día que las empresas dejen de querer abrir, pero porque sepan que aunque lo hagan, nadie va a entrar a la tienda. Y será una victoria colectiva, de quienes trabajan en el sector, de la clase trabajadora en su conjunto y de una sociedad que defiende un modelo en el que seamos algo más que una VISA con patas, un modelo en el que seamos ciudadanos y no consumidores.

Con más organización y más sindicato en los centros de trabajo y con más movilización laboral y social, acabaremos consiguiendo aquello que nos propongamos.